Después del diagnóstico, se define el producto, la marca, la densidad y la técnica de aplicación para embellecer, reestructurar, feminizar o masculinizar un rostro totalmente, logrando después de la aplicación del tratamiento, restaurar las facciones según la anatomía, resaltando los rasgos de cada persona obteniendo un resultado armónico integral y natural sin necesidad de dolor, sedación o cirugía.
Los resultados se visualizan de manera inmediata, sin embargo, después de algunos días llega a su punto óptimo la revitalización facial, dando resultados por 12 y hasta 18 meses, mismos que pueden variar dependiendo de los hábitos de cada paciente.
A través la armonización facial es posible lograr resultados naturales y satisfactorios, resaltando la belleza única de cada persona y brindando un aspecto facial más equilibrado y estéticamente agradable.